Mi historia tiene final feliz. Intentaré resumirlo pero es probablemente que me quede bastante largo... Estuve 11 años con mi primera pareja, ya desde el primer momento había red flags que ahora mismo me harían decir hasta aquí pero era inexperto (no tan joven). Todo lo que salía mal (o no a su gusto) en casa era culpa mía aunque lo hubiese hecho ella, la opinión de la vecina contaba más que la mía, estaba años echandome en cara cosas que según ella había hecho mal... En el tema sexual era muy reprimida por la educación que había tenido en casa, casi nunca quería hacer nada, y yo la respetaba, por supuesto. Hasta que alguien le habló de algo maravilloso llamado orgasmo (ella nunca había tenido ninguno) y se obsesionó con eso. A partir de ahí pasó de 0 a 100 de un día para otro, de tener que insistirle para tener sexo muy de vez en cuando pasó a prácticamente obligarme a hacerlo cada día, a veces me sentía violado, le daba igual si me encontraba mal, y si no tenía orgasmos (spoiler: nunca tuvo ninguno) era porque yo era un inútil que no servía para nada. Llegué a creérmelo, yo ya estaba acomplejado no, lo siguiente, cuando alguien le habló de algo llamado Badoo. Entró por curiosidad y en seguida empezaron a acribillarla a mensajes. Al cabo de poco tiempo me propuso tener una relación abierta, yo le dije que no, al final acabé aceptando porque era eso o cortar. Otra cosa que no debí haber aceptado nunca, a partir de ahí mi vida se convirtió en un infierno. En una relación abierta se supone que lo importante es la pareja, los demás son diversión y punto, pero yo dejé de existir, no podía hacer planes con ella porque cada vez que le proponía algo ella ya había quedado con alguien. Aún así fuimos a ver a una sexóloga para intentar conseguir ése grial del orgasmo que ella, a pesar de ser culpa mía, tampoco conseguía con otros. Evidentemente ella sabía más que la sexóloga y lo que ella decía se lo pasaba por el mismo sitio que a todos los tíos que conocía por las apps de citas. Un día tuvo una mala experiencia con uno de ellos y decidió que se acabó la relación abierta (sí, claro). Yo me lo creí, hasta que llegó nuestro aniversario (el décimo) y yo con toda mi ilusión, ya que parecía que se había acabado el infierno, le propuse mil planes para celebrarlo que ella directamente ignoraba, hasta que llegó el día y me dijo que había quedado "con una amiga" (arregladísima de pies a cabeza) y ahí me quedó claro que seguía tirándose a todo lo que se movía. Parecía como si quisiera que le pegara o algo así porque se sorprendió cuando no lo hice (ni se me pasó por la cabeza aunque mi cabreo no era pequeño precisamente). Ese día al final no se fue con "su amiga", fuimos a cenar (aunque fue cualquer cosa menos una celebración), y volvimos a la relación abierta. Así estuvimos otro año que cada vez me trataba peor, hasta que encontró a otro que era algo más que un polvo (que seguramente es lo que buscaba) y me dio la patada. Fue el mayor favor que me hizo en 11 años, mirando atrás no entiendo cómo aguanté lo que aguanté, tengo claro que nunca volveré a aguantar ni una décima parte. Seguimos compartiendo piso, ella se quedaba el que teníamos a medias, me pagaba mi parte y yo me iría cuando encontrase uno para mí, no quería volver a casa de mis padres por no acomodarme a mis 42 años, pero la situación cada vez era más insostenible, yo llegaba a casa de trabajar con ganas de desconectar y descansar y sólo recibia reproches y broncas por todo, intentaba ignorarla pero al final acababa haciéndome contestar (y evidentemente el malo era yo), y al final tuve que irme a casa de mis padres o hubiesemos acabado en las noticias (y menos mal porque al cabo de poco llegó el Covid, no quiero ni pensar estar confinado con ella...). En plena pandemia, cuando nos dejaron salir a andar empecé a salir a pasear el perro con una conocida que en seguida empezó a ser amiga, cada día encontrábamos más puntos en común, y en menos de un mes, exactamente 7 meses después de dejarlo con mi ex, empezamos una relación, y así seguimos a día de hoy, viviendo juntos desde hace 3 años, sin haber tenido aún ni una pelea, consiguió quitarme el complejo con el sexo y a día de hoy tanto mi actual pareja como yo disfrutamos del sexo (y tiene orgasmos), o sea que tan inútil no debía ser. Y en una ocasión mi ex me lo preguntó, cuando se lo dije se puso hecha una fiera, que no se lo creía (mi respuesta totalmente sincera fue "me da igual que te lo creas o no"). Ella hasta donde yo sé aún no lo ha tenido. Ni lo tendrá porque para empezar no conoce ni quiere conocer su propio cuerpo
R
RayWashed
@RayWashed
Mensajes
-
Sobrevivir a un narcisista -
Sobrevivir a un narcisista@Eiphos Sí, claro, he resumido mucho, la historia daría para un libro... Pero como dices ya hemos salido, y mi caso, viendo otros como el tuyo, no es de los peores. Lo positivo es que de todo se aprende, yo he aceptado cosas que ni me plantearía volver a consentir, y además aprecio mucho más lo que tengo ahora (y me consta que a mi pareja, que también aguantó lo suyo con su ex, le pasa igual). Y creo que lo importante es eso, aprender a poner límites, más que no querer enamorarse, porque si llega el momento nos enamoramos igual. Yo tampoco quería, en mi experiencia el amor era sufrimiento, y mi pareja actual tampoco tenía ninguna intención, pero pasó. Afortunadamente pasó