Os cuento mi historia, porque estoy muy perdida y no sé qué hacer.

Tengo pareja desde hace más de 4 años. Para las que tenéis más de 30, sabéis lo difícil que es encontrar a un tío que merezca la pena a estas edades. No digo que la relación sea perfecta pero es sana, podemos hablar de todo, no hay mentiras, celos patológicos, cuando hay problemas hablamos y se trata de solucionar por ambas partes... una relación normal, vaya.

El caso es que nosotros nos conocimos en mi provincia y nos fuimos a vivir juntos a los 2-3 años. Al año de esto, mi pareja me dijo que necesitaba volver a su pueblo, que llevaba muchos años fuera y que no acababa de sentirse bien donde estábamos. Tras mucho hablarlo, decidimos que yo me mudaría a su pueblo porque nos gustaría formar una familia y ahí tendríamos un ambiente más tranquilo y a su familia de apoyo. El problema es que ya llevo medio año en su pueblo y no me acabo de adaptar. El clima es hostil, al pueblo le faltan muchas cosas (playa, centro comercial...) y no he hecho amigas. Esto último posiblemente sea porque sigo desplazándome a mi provincia a menudo porque, aunque me han adaptado el trabajo, sigo teniendo que ir mínimo 2 veces al mes para quedarme varios días. El caso es que pienso en dejar ese trabajo y vivir siempre en el pueblo y noto como que me ahogo. Si pienso en tener hijos igual, porque no voy a poder viajar tanto a casa como me gustaría. No me quiero imaginar recién parida con solo su familia como apoyo (que sí, la mía y mis amigas vendrían, pero no es lo mismo). O peor, un embarazo de riesgo, de esos en los que no puedes trabajar en un montón de meses, sin poder salir del pueblo.

Básicamente, mi dilema es vivir en donde nací o buscar el modo de adaptarme para mantener a mi pareja. Lo hemos hablado y él no quiere volver allí. Sí estaría abierto a mudarnos a otras zonas de España o de Europa, pero siento que aunque puedan ser sitios con más comodidades, seguiré sin tener apoyo (y será aún peor porque tampoco tendremos a su familia). ¿Qué debería priorizar?